Misión

Escrito el 23/08/2020
Néstor Maceira | Cafh Argentina


Tengo una sola misión:
Dar la bienvenida a la verdad.
En el vaciamiento progresivo de las pasiones
En el aquietamiento del pensamiento,
En la sublimación de las energías
Las formas se van haciendo leves, ligeras,
Y en mi alma dispuesta y abierta
La verdad reposa en su silencioso lecho.
Y al aquietarse las aguas
Aparece a la vista de quien mira hacia adentro,
De quien oye el sonido de la noche,
De la mañana,
Del día radiante.
De quien al verte te ve,
Al oírte te escucha,
Al tocarte te siente.
En la serena luz de tu mirada
Está expresa toda la verdad de la vida.
En la tierna inocencia del pasto brotando,
De la yema del árbol que está a punto de abrirse
De la escarcha nacida en la noche que eriza el campo en la mañana:
La piel de la Tierra.
En el amor que late incesante,
Silencioso,
Fresco.
En cada movimiento.
Sólo vivo para dar la bienvenida a la verdad.
Para ser su testigo,
Su expresión,
Su alegato.
Pero en esto no soy diferente de ti,
Ni de nadie.
Sólo reconozco nuestra naturaleza común,
Nuestra identidad natural,
Nuestro aliento verdadero.
En esta misión soy uno contigo
Y tú, por fin, vives en mi corazón.
En esta verdad
Estoy vivo para siempre
Y tú conmigo.