En algún lugar de mi alma
Aún vive ese momento
En que me besaste en la frente
Y me dijiste:
Ahora ve.
Desde ese día he marchado
Con tu aliento en mi corazón,
Con tu luz en la mirada,
Con tu anhelo como motor y guía.
Ha pasado mucho tiempo
Y sin embargo,
Ningún tiempo ha pasado.
Caminé innumerables caminos
Pero en verdad,
Ninguno he andado.
Sigo hoy a tu lado como siempre
Y en ese estar contigo
La distancia ha desaparecido.
Mis ojos miran a lo lejos:
El horizonte es una línea que se extiende siempre más allá.
Parecería entonces que no hay forma de llegar.
Parecería que el camino no termina nunca.
Y sin embargo
Tú estás conmigo ahora.
No al final de ningún camino.
No luego de nada que deba suceder antes.
Simplemente
Sos mi esencia,
Mi naturaleza verdadera,
La que yace antes de esta aparente forma,
De este lago de sueños,
De este refulgir de luces que estallan en el cielo.
Parado una vez más en la colina de la vida
Miro a lo lejos
Y sólo veo, siempre, tus ojos mirándome.
Hablo
Y solo escucho tu voz dictando las palabras,
Brotando cono un agua suave de un manantial sereno.
Mi corazón está hecho de ti,
Mi cuerpo es una emanación de ti,
Mi alma es la forma que toma tu voluntad,
Mi vida es sólo tu sueño echando vuelo.
Recuerdo
Escrito el 25/08/2020
Néstor Maceira | Cafh Argentina